Las fases de todo buen estudiante.

Las fases de todo buen mal estudiante

Negación:No quiero estudiar.

La primera fase de todas empieza en un punto muy muy remoto de tu estómago. Los médicos no lo cuentan en sus libros pero todos lo conocen. Anida en la boca del estómago y empieza a palpitar cuando ya es, quizás, demasiado tarde.

La tragedia es casi inevitable cuando ese pequeño, inapreciable y puñetero Bio-Pepito Grillo decide aparecer.  Se trata de un curioso reloj biológico estudiantil. Aparece cada época de exámenes para recordarte que, aunque es probable que ya sea demasiado tarde, tienes que estudiar.

Suele manifestarse en plena resaca, cuando te sientas en el sofá o incluso durante la más pura de las procrastinaciones.

El síntoma por excelencia de este reloj biológico es el clásico y archiconocido: No quiero estudiar.

Doble negación: Mañana empiezo a estudiar

Lo malo del Bio-Pepito Grillo es que va y viene, tanto que a veces se te olvida. Cuando se descuida, tú bajas a por una caña y acabas cerrando el pub de turno un miércoles de madrugada.

Aparece de nuevo cuando estás cambiando de caña a cubata, es una leve e inapreciable vibración en la boca del estómago que acallas con un : Mañana empiezo a estudiar. 

Ese mañana se encuentra exactamente 12 días 3 horas 25 minutos y 4 resacas después.

Autoengaño: Esto está chupao

Llegas a la biblioteca, abres los apuntes, los ordenas y calculas el número de hojas, temas y descansos que te tocan cada día para poder abordar todo el temario. Subestimas la asignatura y casi hasta te da para salir 2 viernes y un disfrutar de un  vermouth dominguero.

Aceptación: Oh Dios mío! Es muchísimo, voy a suspender!!

Descubres que el punto anterior fue toda una farsa, que cada tema es infumable y que tardas 3 días más de lo previsto en acabar una página. Según tus cuentas anteriores ya habrías aprobado la asignatura hace exactamente año y medio por lo menos y de momento no has pasado del índice.

Cunde el pánico, barajar los apuntes con ansiedad es casi inevitable y solo puedes gritar: Oh Dios mío! Es muchísimo, voy a suspender!! (Bajar a por una caña para "Liberar tensiones" no ayuda)

Crecimiento exponencial de tus posibilidades: Aquí es cuando te creces.

 Solo te has mirado 11 temas de 21, has pasado por una montaña rusa emocional y ahora estás en lo más alto. No te da tiempo a mirar más materia y decides "A lo hecho pecho, voy con lo puesto", que sea lo que Dios quiera, si cuela-cuela y toda clase de invocaciones al dios del Azar.

Arrepentimiento:

Es el día antes del examen, el reloj biológico estudiantil está con el vibrador activado, sueñas con una gripe imprevisible, un leve atropello y puede que hasta con un aprobado general. No quieres ir, la tragedia es inminente y ya le ves las orejas al lobo.

¿Qué "carallo" hice durante todo el cuatrimestre?

Resignación:

Aceptas la derrota, vuelves a la fase dos y juras al viento:

A esta pinta pongo por testigo.... que jamás volveré  ... A quién quieres engañar?

Ya si tal para Septiembre...

¡Suerte a todos!